Necesidad de una Segunda Opinión Médica.

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Generalmente, el  médico realiza el diagnóstico y propone el tratamiento de un paciente en función de sus conocimientos de la patología y de la correcta interpretación y aplicación de los medios técnicos a su disposición. El diagnóstico es un proceso de interpretación de datos y las diferentes opciones terapéuticas son consecuencia del mismo y por lo tanto, están sujetos a error o a diversas interpretaciones dados los conocimientos y experiencia del profesional y de la calidad de la información sobre el caso que tenga a su disposición

Si las personas van  al médico y no están satisfechas  con la opinión del médico, pueden tener derecho a una nueva evaluación médica por un médico diferente. La razón de solicitar una segunda opinión se debe a que las personas quieren asegurarse que reciben la atención y el tratamiento que mejor se adapten a sus necesidades. Una segunda opinión implica que otro profesional médico o conjunto de profesionales, revisen en conjunto la información del paciente pudiendo confirmar un diagnóstico inicial, o sugiriendo cursos de acción además de  poder ser utilizado para comparar los caminos de manejo sugeridos. De esta forma, puede asegurarse que el tratamiento sea el correcto dada la condición del paciente. Si la segunda opinión guía adecuadamente el manejo del paciente, puede disminuir costos de uso del sistema, la incidencia de morbi-mortalidad e impactar positivamente los años de vida saludable de un paciente.

Usualmente, un paciente o sus familias buscan una segunda opinión porque:

·                 -  La presunta condición médica puede poner en riesgo la vida de la persona.

·                 - Presentan una enfermedad grave o lesión crónica.

·                 - Se desconoce la condición que el paciente tiene.

·                 - El manejo recomendado en primera instancia representa riesgos para la integridad del paciente.

     - El adecuado manejo de su condición, será significativo para su futura calidad de vida. 

Una segunda opinión puede ser útil en la evaluación, duda o incertidumbre sobre en el diagnóstico, conducta y tratamiento ofrecido. Debe ser visto como una herramienta para tomar una decisión informada sobre el tratamiento. Una segunda opinión no es una moción de censura contra el médico tratante, es la oportunidad de obtener más información y una nueva perspectiva de los datos disponibles.

Hasta la proxima.